jueves, 28 de junio de 2007

Canción

El sol en desierto grande
y la sal que nos quemaba,
el frío en las soledades,
camanchaca y noche larga.


El hambre de piedra seca
y quejidos que escuchaba,
la vida de muerte lenta
y la lágrima soltada.


Las casas desposeídas
y el obrero que esperaba
al sueño que era el olvido
sólo espina postergada.

El viento en la pampa inmensa
nunca más se terminará.
Dureza de sequedades
para siempre se quedará.


Salitre, lluvia bendita,
se volvía la malvada.
La pampa, pan de los días,
cementerio y tierra amarga.
Seguía pasando el tiempo
y seguía historia mala.
Dureza de sequedades
para siempre se quedará.


El sol en desierto grande
y la sal que nos quemaba,
el frío en las soledades,
camanchaca y noche larga.


El hambre de piedra seca
y quejidos que escuchaba,
la vida de muerte lenta
y la lágrima soltada.


(L. Advis-Quilapayún)

sábado, 23 de junio de 2007

Un día en la vida

Despertar un cuarto para las nueve. Ponerse algo de ropa encima. Lavarse la cara y bajar al comedor del hotel a tomar desayuno. Un té o un café, un sandwich de jamón y queso, o huevos revueltos, o tostadas con mermelada, más un vaso de jugo y un yogurt.

De vuelta a la pieza, habitación 215. Dormir otro rato o flojear entre las sábanas disfrutando de no hacer nada más que zapping por los canales que ofrece el cable.

Desesperezarse, tomar una ducha que cuesta un poco regular para que quede con la temperatura deseada. Casi no hay necesidad de toalla. el cuerpo se seca prácticamente solo. El ambiente es seco, eso explica la piel y los labios partidos.

Vestirse. Tomar el discman. Elegir un disco con música ad-hoc (esta samana ha sido sólo Illapu y Los Jaivas) y salir.

Encontrarse de frente a la plaza. Esa con muchos árboles y que hace olvidad por un momento el estar en medio del desierto más árido del mundo. Esa plaza con sus dos llamitas de piedra, una echada y la otra pastando. Esa plaza tan típicamente chilena, con la iglesia a un costado y donde, extrañamente, no está la municipalidad.

Mirar alrededor. Ver harta gente caminando con paso cansino. Ir en busca de un lugar donde almorzar. Caminar por el centro. Vargas, Latorre, Sotomayor, V. Mackenna. Entrar a un local de nombre atrayente por lo familiar, 'Barceló'. Pedir el menú del día, no muy contundente, pero no muy diferente a los que ofrecen en el centro de Santiago por la misma plata. Con bebida y postre incluídos. Ver las noticias de las 2 de la tarde y entender porqué la gente en regiones dice que Chile es Santiago. En Chile hace frío, dice Juan José Lavín, cae nieve y hay problemas con el Transantiago. En fin. Sentirse excluído, separado, en otro lugar. Acá mueren tres personas. Allá nadie lo sabe. Esperar a Ivan Torres para que nombre en su informe del tiempo a esta tierra olvidada de la pantalla chica. Divisar, por un segundo, o dos, el nombre de esta ciudad, ahí, entre Iquique y Antofagasta. Terminar el almuerzo y enfilar hacia el trabajo.

Llegar a Vivar, subir las interminables escaleras. Dar mi nombre al citófono. Saludar y empezar la pega.

10 de la noche. Salir, bajar esas largas escaleras, largas como sueños, como el cielo del desierto. Caminar por Ramirez, que es un boulevard. Pasar junto a la estatua del minero (hecho, supongo, de cobre). Pasar junto al estadio techado y al teatro municipal. Dudar si volver inmediatamente al hotel o internarse en alguna de las numerosas schoperías que inundan las calles aledañas. La musica que sale del 'Che Carlitos' es una invitación que aun no he aceptado. Parece un tanto peligroso.

Encontrar una panadaría abierta. Comprar una empanada calientita. Una bebida. Volver al hotel. Prender la tele. Llamar a quienes me quieren y se preocupan por mí. Destapar una grolsch que me espera en el frigo-bar. Comer la empanada. acostarse y esperar un nuevo día. Un día que será igual al anterior. Sentirme como Bill Murray en aquella película sobre el día de la marmota. Donde todos los días son iguales, pero diferentes. Pensar que, al menos, será un día menos para volver.

sábado, 16 de junio de 2007

Cacharpaya del Pasiri

Ya me voy yendo, me voy feliz
Desde mi pueblo donde nací
Ya me voy yendo, me voy feliz
Desde mi pueblo donde nací

Gentes queridas, parto cantando,
Añoro el día que volveré.

No me voy solo, les llevo dentro
Bailaré al ritmo de su corazón
No me voy solo, les llevo dentro
Bailaré al ritmo de su corazón

Ya me voy yendo, me voy feliz
Desde mi pueblo donde nací
Ya me voy yendo, me voy feliz
Desde mi pueblo donde nací

Gentes queridas, parto cantando,
Añoro el día que volveré.

No me voy solo, les llevo dentro
Bailaré al ritmo de su corazón
No me voy solo, les llevo dentro
Bailaré al ritmo de su corazón

(Illapu)

martes, 12 de junio de 2007

La música en mi vida II

Capitulo segundo: Los 90 y mi acercamiento al Pop y Glam rock.

A fines de los 80 yo ya era un poco más grande y tenía un vecino que era como cinco años mayor que yo, quién me llevó por primera vez a descubrir el glam rock y el pop.

El pop ya lo conocía gracias a mi madre. A ella le gustaba Michael Jackson y una vez mi tia Ruthy me regaló el cassette Bad, para mi cumpleaños. Ahí conocí temas esenciales del cancionero pop como ‘Smooth criminal’, ‘Bad’ y ‘Man in the mirror’. Sin embargo lo mejor fue cuando una vez un compañero de trabajo de mi papá me regalo el vinilo de Thriller, porque estaba rayado. Resulta que solo tenía un pequeñísimo salto en la extraordinaria ‘Billie Jean’. Ese disco fue mi primer disco de cabecera. Recuerdo que lo escuchaba prácticamente todos los días en el equipo nuevo que mi papi se había comprado por aquellos días (endeudándose sin prever las consecuencias). Ese álbum es entero bueno, ‘Beat it’, ‘Don’t stop ‘till you get enough’, ‘The girl is mine’ (con Paul McCartney), ‘Human nature’, por nombrar sólo algunas. Recuerdo bailar y gozar todos y cada uno de los cortes. Excelente, preciso, lejos lo mejor de Michael Jackson y la razón para ser considerado el Rey del Pop.

Bueno, debo reconocer que uno también comete errores en esta vida y pasaré a contar uno del que no me siento precisamente orgulloso, pero así es la vida, de dulce y agraz. Recuerdo que por aquellos días la fiebre del Pop era tal que apareció un grupo americano de 5 niños high que cantaban canciones y melodías muy comerciales y que se hacían llamar los nuevos chicos de la cuadra. Sip, The New Kids on the Block. Y resulta que me convertí en casi fanático. Conocía todas las canciones y las coreografías las bailaba con mis primas Moni y Vero y mis amigos Mito y Javi (sorry, pero no podía caer solo, jeje). Recuerdo que cantábamos canciones como ‘Tonight’, ‘Hanging tough’ y ‘Step by step’. Claro que la devoción por esos pseudo-artistas se me fue al suelo cuando vinieron a Chile para el concierto de Amnistía internacional en el Estadio Nacional. Creo haber esperado todo el día ver su actuación por la tele, para que, cuando finalmente iban a subir al escenario, apareciera Augusto Góngora diciendo que los New Kids habían llegado a un acuerdo para no ser televisados. Inmediatamente me di cuenta que un artista se debe a su público, y que ellos no merecían estar en mi precaria pero creciente discoteca personal de cassettes TDK grabados en la radio "nueva". A si que al otro día ya había borrado sus cassettes y todo rasgo de ellos en su paso por mi vida. Creo que fue la primera y última vez que me gustó un grupo ultracomercial, desechable, de esos hechos sólo para vender (Thanks God!).

Casi paralelamente me fui acercando a los riffs y la parafernalia del Glam rock. Mi primer cassette fue ‘New Yersey’, de Bon Jovi. Era de esos cassettes antiguos, blancos y con los nombres de las canciones en español. Recuerdo haberme aprendido todas las canciones, con solos de guitarra de Richie Zambora incluidos. Ya a mediados de los 90 mi discoteca había crecido bastante con música de Bon Jovi, Poison, y mis favoritos, Guns n’ Roses. El primer cassette original de los Guns lo recibí de mi mami y fue ‘Use your Illusion II’. Al principio como que no me gustó mucho, ya que los singles de las radios correspondían casi en su totalidad al ‘Use your Illusion I’. Eso, hasta que salió Terminator 2 con ‘You could be mine’ como tema central. Ahí empecé a escuchar el álbum y quedé pa’ dentro con temas como ‘Civil War’, ‘Shotgun Blues’, ‘Get in the ring’, ‘Locomotive’, y por supuesto ‘Estranged’.

También tuve un acercamiento bastante superficial al rock más pesado, de donde sólo rescaté a Metallica. Mi padre me regaló el Black Album para navidad, y ese cassette estuvo todo ese verano en mi también nuevo personal stereo. Fantástico. La voz de Hetfield, la batería de Ulrich y los riffs de Hammett en temas como ‘Through the never’, ‘Wherever I may roam’, ‘The God that failed’, ‘Don`t tread on me’, ‘Of wolf and man’, etc. el cassette también traía las letras de las canciones. Creo que desde ese momento me empezó a interesar el Inglés y me gustaba "traducir" las canciones pa’ saber de que trataban.

En suma, podriamos decir que mi primera mitad de los 90 fue determinada, musicalmente hablando, por Sábado Taquilla, del canal 7, la radio Concierto, y la naciente Rock & Pop.

Cancionero:
-Thriller (Michael Jackson)
-Billie Jean (Michael Jackson)
-The way you make me feel (Michael Jackson)
-Smooth criminal (Michael Jackson)
-Don’t stop ‘til you get enough (Michael Jackson)
-Bad (Michael Jackson)
-Bad medicine (Bon Jovi)
-Born to be my baby (Bon Jovi)
-You give love a bad name (Bon Jovi)
-Livin’ on a prayer (Bon Jovi)
-99 in the shade (Bon Jovi)
-Blood on blood (Bon Jovi)
-Girls, girls, girls (Motley Crue)
-Epic (Faith no more)
-Sweet child o’ mine (Guns n’ Roses)
-You could be mine (Guns n’ Roses)
-Paradise City (Guns n’ Roses)
-Estranged (Guns n’ Roses)
-Give me something to belive in (Poison)
-Unskinny Bob (Poison)
-Enter Sandman (Metallica)
-Sad but true (Metallica)
-My friend of misery (Metallica)

Discoteca:
-Thriller (Michael Jackson)
-Bad (Michael Jackson)
-New Jersey (Bon Jovi)
-Metallica (Metallica)
-And justice for all (Metallica)
-Master of puppets (Metallica)
-Use your illusion I (Guns n’ Roses)
-Use your illusion II (Guns n’ Roses)
-Appetite for destruction (Guns n’ Roses)
-Lies (Guns n’ Roses)

jueves, 7 de junio de 2007

Hay que hacerse de nuevo cada día

Hay que hacerse de nuevo cada día
poner en un cordel cada derrota
colgar en nuestra historia unos pañales
que digan: "seguimos intentando".

Hay que hacerse de nuevo cada día
ponerse muy temprano los zapatos
que nos lleven hacia el arco iris
donde está la idea, el fruto, el canto.

Tenemos que juntar nuestras verdades
tenemos que reír a toda costa
tenemos que inventarnos la esperanza
hay que hacerse de nuevo cada día.

Hay que pintar de nuevo este paisaje
buscarnos nuevos lentes de contacto
conseguir un nuevo silabario
nuevas carreteras y aeroplanos.

Hay que hacerse de nuevo cada día,
subiendo de la mano la montaña
no harán por nosotros la tarea
de fundar ciudades del mañana.

Tenemos que juntar nuestras verdades
tenemos que reír a toda costa
tenemos que inventarnos la esperanza
hay que hacerse de nuevo cada día.

(Schwenke & Nilo vol. 1-Schwenke & Nilo)

martes, 5 de junio de 2007

Brocacochi

Hace algún tiempo todo era perfecto
Nada me hacia enojar, todo para mi era gozar.

Fueron pasando los años y algo nos hizo daño,
Crecimos sin darnos cuenta
Que al juguete se le acabo la cuerda.

Por arte de magia se pierde la gracia.
Volvamos a recuperarla, comencemos a practicar.

Mi intención es comprender la vida como antes,
Tratar de gozar hasta cuando vaya a dormir.
Vivir y reír como un payaso recién pagado,
Volver a sentir lo que el día tiene para mí.

Saben qué?... el mundo fue avanzando
Y yo ... me fui quedando, escondido en mis propias ideas
Dando vueltas el reloj de arena.

Como Florcita Motuda, no tengo ninguna duda,
Es hora de acercar el placer y negarse a envejecer.

Mi intención es comprender la vida como antes,
Tratar de gozar hasta cuando vaya a dormir.
Vivir y reír como un payaso recién pagado,
Volver a sentir, borrando la razón,
Creciendo sin temor que el tiempo me aplaste al fin,

Sin agonizar!


(Chancho en Piedra, Marca Chancho)

lunes, 4 de junio de 2007

Una experiencia marrana

El pasado sábado 2 de Junio asistí al cumpleaños número 13 de los geniales Chancho en Piedra, en el remosado teatro Caupolicán. Mi prima vino especialmente desde Viña, Juanito en mano, para la ocasión. Ya a las seis y media nos encontrábamos ambos caminando por calle San Diego rumbo al Caupolicán. El día estaba algo frio, pero no lo notamos. Unos minutos pasada las siete de la tarde, llegó el resto del contingente: La Moni, el Yayo y la Romi. El concierto estaba pactado para las 20 hrs. Pero, como estamos en Chile, los primeros acordes sonaron tipo ocho veinte. El primero en salir fue Lalo (vocalista de los Chancho), quien presentó a los teloneros. Eran los argentinos Mancha de Rolando. A mi no me gustaron mucho, sin embargo hubo un par de temas que me llamaron la atención. De todas formas, en general, eran todos sus temas muy parecidos.


Como a las nueve y media comienza el leseo con 'Peor es mascar lauchas' y, proyectados en video, aparecen varios de los nombrados en la canción saludando a los Chancho (a saber, Peter Rock, Enrique Maluenda, Pedro Mesone, Wildo, el Tío Memo, entre otros). De ahí, pegaíto, aparecen en escena Toño, Lalo, Felipe y Kvzón, con atuendos chinos, y se mandan un mix un tanto largo con varios temas de todos los discos de la banda. Están celebrando su cumpleaños número trece, y según el calendario chino, este año es el año del chancho. Por lo tanto, todo el escenario, y el show completo, están llenos de un ambiente chino. Con simbolos orientales, dragones, tipos practicando artes marciales. Incluso, en la entrada, nos dieron galletas chinas, de esas que traen un mensaje en su interior. Hasta Juanito (el símbolo de los Chancho en Piedra) aparece ad hoc con un look tipo Mao Tse Tung por las pantallas.


El concierto fue bastante largo (más de dos horas), por lo que se pudo recorrer bastante de su trayectoria en estos trece años, y de su discografía, que cuenta con siete títulos. Sin embargo, el show estuvo cargado principalmente a dos discos, el último (Desde el batiscafo, 2006) y Ríndanse terricolas, 1999. Es así como pudimos escuchar en vivo temas como 'La telaraña', 'Vida de oso', 'Multi ricachón', 'El almacén', entre otros, del último disco, y clásicos del Ríndanse... como 'Volantín', 'Yacuza', 'Voy a resucitar', 'Solo contra el mundo', 'Locura espacial' y otros.


A medida que pasaban las canciones, éstas se fueron intercalando con diferentes performances de la cultura china. Además, y como era cumpleaños, hubo invitados. Por supuesto uno de los más ovacionados por la comunidad marrana fue Hector "Parquimetro" Briceño (el guatón del trombón en ¿Cuanto vale el show?). El cantante de Papanegro subió al escenario para interpretar 'Volantín'. Tambien estuvo, como no, uno de los mentores del grupo, el gran Florcita Motuda. Como guinda de la torta, en teclados se lució el señor Camilo Salinas (Ex Pettinellis, actual Inti-Illimani historico).

En suma, un concierto que tuvo de todo. Muchas buenas canciones, con la siempre impecable interpretación de los Chancho. Varias canciones con arreglos especiales para la ocasión, tipo orientales. Un gran show, lleno de sorpresas, de esas que los chancho están acostumbrados a brindar. Con dragones chinos bailando 'socio', por ejemplo. Con una bellisima interpretación de Kvzón y su guitarra para 'Lophophora', y con muchisimas cosas que hacen de cada concierto de los Cancho en Piedra algo especial.


Comentario aparte merecen los hermanos marranos, una especie de secta donde todo aquél que guste de la música de los Chancho en Piedra es bienvenido. Fue genial ver desde las galerías del Caupolicán como los miles de Juanitos se alzaban al son de todas las canciones. Juanitos disfrazados, pintados, o sin pintar. Cada uno es particular y único. Y eso los hace especiales. Mi prima, ultra fanática, se las cantó todas, tal como la mayoría de los asistentes a este gran show. Debo reconocer que hubo varios temas que conocía poco, especialmente del último disco. sin embargo, los Chancho saben ofrecer un show que no aburre, más bien cautiva y entretiene. De todas formas uno queda siempre con gusto a poco, y cuando tocaron 'Socio' y se despidieron, me quedé con ganas de haber escuchado 'Edén', 'Voy y vuelvo', o 'Sinfonía de cuna' (una de mis favoritas). Para otra vez será, porque estoy seguro que vendrán muchas otras.

Para finalizar sólo puedo decir que, a quien guste de los Chancho en Piedra, debe verlos en vivo al menos una vez al año, ya que practicamente cada show es único e irrepetible. Y a quienes no gustan de su música, sólo decirles que "Somos más, más marranos, a si que tiembla pobre gusano. Si nos amas, te alegramos. Si molestas, más te molestamos." (Hermanos marranos-Marca Chancho).

"Viva Chile mierda
Y los Chancho en Piedra"

La música en mi vida I

Capitulo primero: Infancia en los combativos años 80.

La música. No concibo mi vida sin música. Hay canciones y melodías que han estado siempre en el momento preciso, en el instante perfecto.

Mis primeros recuerdos de la música en mi vida se remontan a cuando era un pequeño niño. Mi padre escuchaba mucha música de protesta. Eran los 80 y el viejo tocadiscos tronaba al son de Quilapayún, Illapu, Inti-Illimani, Ángel e Isabel Parra, Schwenke & Nilo, Arak Pacha entre otros. Todos los domingos era costumbre que mi padre se juntara con sus compadres, y junto a una pilsener (en aquellos días no se hablaba de cerveza) escuchaban cassettes piratas con portadas fotocopiadas donde los Illapu cantaban que "un día en la mañana saldrá el sol, para alumbrar de nuevo".

Música infantil no recuerdo mucho. Probablemente escuchaba Mazapán (de hecho, tenía un cassette), pero no recuerdo con claridad. Lo que si recuerdo es un programa infantil de la radio Umbral los domingos en la mañana. Fue gracias a aquel programa que nos enteramos de la muerte de Gabriel Parra, baterista de Los Jaivas, grupo que conocería a cabalidad varios años más tarde. Pero, en realidad, música infantil no escuché sino hasta que nació mi hermano, y le regalaron un cassette de Pin-Pón.

Para el plebiscito cantaba "Vamos a decir que No, oh oh." todo el día. Supongo que no entendía mucho, pero la canción era pegajosa y la promesa esperanzadora ("Chile, la alegría ya viene"). También recuerdo ‘El vals del No’ y ‘Nadie lo quiere ver’ de Florcita Motuda. Creo que desde aquella época ya me parecía atrayente un tipo que, cantando muy mal, tuviera esa personalidad y sonara en la radio.

En resumen, en los 80 mi bitácora musical se paseaba por las canciones de protesta de los domingos y de la radio Umbral (donde mi tío Ricardo era locutor), y las canciones románticas de cantantes latinos de los 70 y 80 de la radio Aurora que escuchaba mi madre cuando hacía el aseo. Como olvidar a clásicos como Camilo Sesto, Miguel Bosé, Julio Iglesias, Buddy Richard, Leonardo Favio, Sandro, Salvatore Adamo, Fernando Ubiergo, Zalo Reyes, Mocedades, Pandora, y un largo etcétera.

Discoteca:
-Cantata Santa María de Iquique (Quilapayún)
-A desatar esperanza!! (Sol y lluvia)
- + Personas (Sol y lluvia)
-Para seguir viviendo (Illapu)
-Raza brava (Illapu)
-Despedida del pueblo (Illapu)
-El canto de Illapu (Illapu)
-Yo defiendo a mi tierra –Vol. 4 (Isabel y Ángel Parra)
-Te invito a mi fiesta (Mazapán)
¡y muchisimos cassettes grabados de la radio y piratas!

viernes, 1 de junio de 2007

Mis últimas 48 hrs

Faltan dos días para que se acabe Mayo, y con él el plazo para pagar la cuota anual del mentado crédito universitario “solidario”. Si, lo sé. Tuve un año para haberlo pagado, sin embargo a 48 hrs. Del plazo perentorio aun no lo he hecho. No importa. Me levanto temprano. Necesito conseguirme un certificado de antigüedad laboral, las 3 últimas liquidaciones, las 12 últimas cotizaciones, y partir a algún banco a conseguirme un tonto crédito para pagar el otro crédito (a eso se refieren cuando dicen que la vida es circular, ¿cierto?).

Llego a un banco, luego a otro y otro más. Cuesta conseguirse un crédito con el sueldazo que gano. Bueno, por último alguien me da cierta esperanza. Llego a la pega. Me llaman de otro banco, para ofrecerme un crédito de hasta un millón y tanto, con muuucho interés a milquinientas cuotas, pactables a tres vidas, más o menos. Dudo si aceptar o no. Me siento como probablemente muchos chilenos cuando realmente necesitan la guita. Espero la respuesta del otro banco, ese que visité en la mañana. A todo esto, debo ir a dejar los documentos necesarios del crédito universitario correspondientes a los ingresos del 2006. Voy a la facultad de Arquitectura, en Marcoleta con Portugal. Hago la cola para el notario. Me falta la fotocopia del carné. Saco la fotocopia. Vuelvo a hacer la cola. Luego, otra cola, más larga aún, para dejar los papeles. Me prometo pagar la deuda a tiempo esta vez (el año pasado, recuerdo, prometí lo mismo).

Quedan 24 hrs. No tengo respuesta de la bella ejecutiva de ventas de voz suave y de nombre Soledad, que me atendió el día anterior. La ejecutiva del otro banco me llama nuevamente. Esta vez ofrece una oferta “Sólo por el mes de Mayo, con descuentos” de $450.000, en doce cuotas de no sé cuanta plata, donde al final se paga como dos veces el mentado crédito. “Un regalo”, dice, “con una tasa preferencial”. Claro, una tasa preferencial para sacarme aún más plata. No gracias.

31 de mayo, nueve y media de la mañana. Decido llamar a la bella ejecutiva para preguntarle por mi crédito. Con su dulce voz me comunica que “su crédito está aprobado”. De un salto salgo de la cama, me ducho, me perfumo, y salgo raudo al encuentro con mi ejecutiva y mi crédito. Llego al banco, hago la correspondiente cola (si no, no es trámite), firmo mil papeles, huella digital incluida y recibo mi dinero. No hay tiempo para ir al banco a pagar el crédito universitario. Mi madre, entonces, toma el dinero, cual testimonio en carrera de posta, y corre rumbo al Banco del Desarrollo más cercano. Finalmente la cuota 2006 del crédito universitario está pagada, y yo con un crédito de consumo por pagar, con su correspondiente cuponera de pago (la primera en mi vida). Ahora si me siento un ciudadano chileno, que cumple con sus obligaciones, y que se endeuda para poder hacerlo. Y, colorín colorado, este cuento en doce cuotas ha recién comenzado.