Quién sabe...

El otro día, y a raiz de unas divagaciones que mi prima escribió en su fotolog, me preguntaba qué tanto uno, como persona, puede influír o marcar a otra gente. Entonces, hice el ejercicio inverso, y me propuse pensar en cuanto ha influído en mi la gente que conozco.Y llegué a la conclusión, parcial, naturalmente, que todos y todas los que se han cruzado en mi camino han marcado y/o influído en mí, aunque sea en lo más minimo. En mi forma de ser, en mi actitud,en mis decisiones, en mis pensamientos y sentimientos, en mis gustos, en mis virtudes y defectos. Sin embargo, y pese a todo, sigo siendo yo, único e inconfundible.

Es exrtaño. Al parecer uno termina siendo la comunión única entre tu energía y todas las otras energias que han interactuado con uno, durante toda la vida (o las vidas, dependiendo de las creencias de cada uno). Por eso uno no puede ser siempre el mismo. Luego, sólo podemos evolucionar, cambiar, como cantaba Violeta.
Y ese cambio es constante, permanente, continuo y evolutivo. Es dialéctica. Uno va evolucionando de acuerdo a los lazos que nos van uniendo con otras personas. El ser humano es un ser social. Como tal, lo que afecta a una persona me afecta también, en mayor o menor medida, a mí. Lo importante es, entonces, dilucidar, darse cuenta de cuánto puede uno cambiar o ser afectado por otros. Y cuánto tú puedes afectar o influir en sus vidas.

En consecuencia, es muy importante el papel de los otros en tu vida. El resultado de una relación entre dos o más personas siempre es más que la simple suma de sus componentes. Es lo que esa relación en sí misma logra ser. Luego, uno es muchas personas a la vez, dependiendo de la persona con la que interactúes y el tiempo y espacio de esa interacción.

Yo, por ejemplo, hasta hace más o menos dos o tres semanas atrás era otro. Y me gustaba quién era. De hecho me gustaría seguir siendo quién estaba siendo. El problema es que la persona que me hacía ser así ya no está a mi lado. Ahora, ahora no sé quién soy, y no sé quién llegaré a ser. Por eso, probablemente, estoy escribiendo esto. Para interactuar con quién pudiera llegar a leelo y así (re)encontrarme conmigo.

Entoces me pregunto: ¿Quién soy yo, realmente?
Who knows...and who cares!